Plagas domésticas en verano: Una molestia que podemos prevenir

plagas domésticas en verano

El verano es una estación que nos invita a disfrutar del aire libre, el sol y la naturaleza. Sin embargo, también es una época propicia para la aparición de plagas domésticas que pueden causar molestias, daños y enfermedades. Algunos de los insectos y roedores más habituales en los hogares durante el verano son las cucarachas, las hormigas, los mosquitos, las moscas, las avispas y los ratones. Estos animales se sienten atraídos por el calor, la humedad, la luz y la comida disponible en nuestras casas.

Para evitar que se conviertan en un problema, es importante adoptar medidas preventivas que dificulten su acceso y su reproducción. En este artículo, te explicaremos cuáles son las mejores formas de prevenir las plagas domésticas en verano y cómo actuar en caso de que ya hayan entrado en tu hogar.

Medidas para prevenir la aparición y control de las plagas domésticas en verano:

  • Mantener una buena higiene en el hogar, especialmente en la cocina y el baño, donde se acumulan restos de comida y humedad que atraen a los insectos.
  • Evitar dejar alimentos al aire libre o en recipientes abiertos, y guardarlos en envases herméticos o en el refrigerador.
  • Limpiar regularmente los desagües, las cañerías y los rincones donde puedan anidar las cucarachas, las hormigas o los roedores.
  • Usar productos repelentes o insecticidas adecuados para cada tipo de plaga, siguiendo las instrucciones del fabricante y respetando las medidas de seguridad.

¿Qué plagas domésticas son más comunes en verano?

En verano, las altas temperaturas y la humedad favorecen la reproducción y el desarrollo de muchos insectos y roedores que buscan refugio y alimento en nuestras casas. Algunas de las plagas domésticas más habituales en esta época del año son:

1. Hormigas: pequeñas pero persistentes

Las hormigas son visitantes habituales en verano, buscando fuentes de alimentos en nuestras cocinas y despensas. Para prevenir su invasión, asegúrate de sellar herméticamente los alimentos, limpia los derrames de inmediato y utiliza repelentes naturales como el vinagre para disuadirlas. Además, sella cualquier grieta o rendija por donde puedan ingresar.

Estos pequeños insectos son increíblemente fuertes y trabajadores, capaces de formar colonias complejas y cooperar entre sí. Sin embargo, cuando invaden nuestros hogares, se convierten en una plaga molesta y difícil de erradicar. Te contamos algunos consejos para evitar que las hormigas se apoderen de tu cocina y cómo combatirlas de forma ecológica y segura:

  • Identificar por dónde entran las hormigas a tu casa. Normalmente, lo hacen por grietas, rendijas o huecos en las paredes, el suelo o las ventanas. Una vez que localices el punto de entrada, debes sellarlo con masilla, silicona o algún otro material que impida el paso de las hormigas. Así evitarás que sigan llegando más y más.
  • Eliminar las fuentes de alimento que atraen a las hormigas. Esto significa guardar los alimentos en recipientes herméticos, especialmente los dulces, las frutas y los cereales. También debes limpiar bien la cocina después de cada comida, retirando los restos de comida y los líquidos derramados. No olvides vaciar la basura con frecuencia y mantenerla cerrada.
  • Usar repelentes naturales que ahuyenten a las hormigas sin dañarlas ni contaminar el ambiente. Algunos ejemplos son el vinagre, el limón, la canela, el café molido, la menta o el clavo de olor. Puedes rociar estos productos en las zonas donde hayas visto hormigas o colocarlos en recipientes cerca de las posibles entradas. Estos aromas les resultan desagradables y les harán huir.

2. Mosquitos: zumbido nocturno indeseado

Los mosquitos son unos de los enemigos más fastidiosos del verano. Sus picaduras pueden causar irritación, inflamación y alergias, además de transmitir enfermedades como el dengue o la malaria. Por eso, es importante protegerse de estos insectos, especialmente por la noche, cuando su actividad es mayor. A continuación, te damos algunos consejos para evitar que los mosquitos te piquen por la noche y puedas dormir tranquilo.

  • Usa ropa adecuada. Los mosquitos se sienten atraídos por el calor y el olor corporal, así que cubre tu piel con ropa ligera, holgada y de colores claros. Evita los colores oscuros y las prendas ajustadas, ya que pueden facilitar las picaduras.
  • Aplica repelente de insectos. Elige un producto que contenga DEET, IR3535 o icaridina, que son los ingredientes más efectivos contra los mosquitos. Aplícalo sobre la piel expuesta y renuévalo cada cierto tiempo según las indicaciones del fabricante. También puedes usar repelentes naturales como el aceite de citronela, el eucalipto o la lavanda, pero ten en cuenta que su duración es menor.
  • Instala mosquiteras en las ventanas y puertas. Esta es una de las medidas más sencillas y eficaces para evitar que los mosquitos entren en tu casa. Asegúrate de que las mosquiteras estén bien ajustadas y no tengan agujeros. Si no tienes mosquiteras, puedes usar cortinas o telas finas para cubrir las aberturas.
  • Utiliza dispositivos eléctricos o ultrasónicos. Estos aparatos emiten una luz o un sonido que ahuyenta a los mosquitos. Puedes colocarlos cerca de tu cama o en las zonas donde haya más presencia de insectos. Sin embargo, ten en cuenta que su eficacia puede variar según el tipo de mosquito y el entorno.
  • Elimina el agua estancada. El agua estancada es el lugar perfecto para que los mosquitos pongan sus huevos y se reproduzcan. Por eso, revisa tu jardín, tu terraza o tu balcón y elimina cualquier recipiente que pueda contener agua, como macetas, cubos, botellas o neumáticos. También puedes añadir unas gotas de lejía o vinagre al agua para evitar que se forme larvas.
  • Enciende velas o inciensos. Otra forma de crear un ambiente desagradable para los mosquitos es encender velas o inciensos con aromas repelentes, como la citronela, el romero o la albahaca. Colócalos cerca de tu cama o en las zonas donde quieras evitar los insectos. Eso sí, ten cuidado de no dejarlos cerca de materiales inflamables o al alcance de niños o mascotas.

3. Cucarachas: invitadas indeseadas

Las cucarachas son insectos que pueden causar problemas de salud e higiene en tu casa. Estos animales se alimentan de restos orgánicos y pueden transmitir enfermedades como la salmonelosis, la disentería o el cólera. Además, pueden provocar alergias y asma en algunas personas. Por eso, es importante prevenir su aparición y eliminarlas si ya han entrado en tu hogar.

Para evitar que las cucarachas se instalen en tu casa, debes seguir estos consejos:

  • Limpia a fondo tu cocina y tu baño, especialmente los rincones y las grietas donde puedan esconderse. No dejes migas, grasa o restos de comida en el suelo, los muebles o los electrodomésticos.
  • Tapa bien los alimentos y guarda los que no necesites en el frigorífico o en recipientes herméticos. Así evitarás que las cucarachas se sientan atraídas por el olor y el sabor.
  • Cierra bien las bolsas de basura y sácalas con frecuencia. No acumules basura en tu casa, ya que es un foco de atracción para las cucarachas y otras plagas.
  • Sella las posibles entradas de las cucarachas, como grietas, fisuras, agujeros o rendijas. Puedes usar masilla, silicona o espuma para taparlas. También revisa las tuberías, los desagües y los conductos de ventilación, ya que pueden ser vías de acceso para estos insectos.
  • Ventila bien tu casa y evita la humedad. Las cucarachas prefieren los ambientes cálidos y húmedos, por lo que debes mantener una buena ventilación e iluminación natural. También puedes usar deshumidificadores o aire acondicionado para reducir la humedad.
  • Usa trampas y cebos para capturar y eliminar las cucarachas. Puedes colocarlos en lugares estratégicos donde sospeches que hay actividad de estos insectos, como detrás de los muebles, debajo del fregadero o cerca de la basura. Estos productos contienen sustancias que atraen a las cucarachas y las matan al ingerirlas o al entrar en contacto con ellas.

4. Arañas: tejedoras de telarañas inoportunas

Las arañas son beneficiosas para el ecosistema, ya que se alimentan de otros insectos que pueden ser plagas o vectores de enfermedades. Además, algunas especies son muy bellas y coloridas, y merecen ser admiradas por su ingenio y habilidad. No obstante, hay personas que les tienen fobia o simplemente no les gusta verlas en su casa. Por eso, es importante saber cómo evitar que se instalen en nuestro hogar y cómo deshacernos de ellas si ya lo han hecho:

  • Limpiar a fondo nuestra casa, eliminando el polvo, los restos de comida y las telarañas que podamos encontrar. Las arañas buscan lugares oscuros y tranquilos donde tejer sus redes, así que debemos prestar atención a los armarios, las esquinas, los techos, las ventanas y las cortinas. También es conveniente sacudir la ropa de cama, las alfombras y los cojines con frecuencia, ya que pueden albergar huevos o crías de arañas.
  • Utilizar repelentes naturales, que ahuyentan a las arañas sin causarles daño ni contaminar el ambiente. Algunos ejemplos son la menta, el eucalipto, el limón, el vinagre, el ajo o la lavanda. Podemos colocar plantas o aceites esenciales de estas plantas en las zonas donde sospechemos que hay arañas, o bien rociar una solución de agua con vinagre o limón por las superficies donde puedan pasar. Estos aromas les resultan desagradables y les harán huir.

Si ya tenemos una infestación de arañas en nuestra casa, podemos recurrir a trampas caseras para capturarlas y luego liberarlas fuera. Una opción es usar cinta adhesiva o papel pegajoso, colocándolo en los lugares donde veamos más actividad arácnida. Otra opción es usar un frasco de vidrio con un cebo dentro, como un trozo de fruta o carne, y dejarlo abierto cerca de donde haya arañas. Cuando entren atraídas por el olor, podremos tapar el frasco y llevarlo lejos.

5. Pulgas y Garrapatas: Preocupaciones para Mascotas y Humanos

Las pulgas y garrapatas pueden saltar o trepar desde el ambiente o desde otros animales infectados hasta tu mascota. Por ejemplo, si tu perro o gato juega con otros animales que tienen pulgas o garrapatas, o si pasea por zonas con hierba alta, arbustos o maleza donde estos parásitos se esconden, puede contraerlos fácilmente. También puedes traerlos a tu casa si entras en contacto con animales o lugares infestados.

Una vez que las pulgas o garrapatas se adhieren a tu mascota, pueden reproducirse rápidamente y generar una infestación. Las pulgas ponen huevos que caen al suelo o al lecho donde duerme tu mascota. Estos huevos eclosionan en larvas que se alimentan de materia orgánica como restos de piel o pelo. Luego se convierten en pupas que forman un capullo protector hasta convertirse en adultos. Las garrapatas también ponen huevos que caen al suelo o a la vegetación. Estos huevos dan lugar a larvas que buscan un huésped para alimentarse. Después mudan a ninfas y luego a adultos, repitiendo el ciclo varias veces.

La mejor forma de prevenir y combatir las pulgas y garrapatas es:

  • Mantén a tu mascota protegida con productos antiparasitarios adecuados para su especie, edad y peso. 
  • Existen diferentes opciones como collares, pipetas, sprays, champús o pastillas que actúan de forma preventiva o curativa contra estos parásitos. Debes seguir las indicaciones del fabricante y del veterinario sobre la frecuencia y la forma de aplicación de estos productos.
  • Mantén limpios los espacios donde descansa tu mascota, como su cama, su manta o su cojín. Puedes lavarlos con agua caliente y jabón o usar productos específicos para eliminar los huevos y las larvas de las pulgas o garrapatas. Asimismo, puedes aspirar el suelo, los muebles y las alfombras de tu casa para eliminar cualquier rastro de estos parásitos.
  • Revisa periódicamente el cuerpo de tu mascota, especialmente si ha estado en contacto con otros animales o ha paseado por zonas con vegetación. Si detectas alguna pulga o garrapata, debes retirarla con cuidado usando unas pinzas o un dispositivo especial para evitar que se rompa y quede parte dentro de la piel. Luego debes desinfectar la zona con alcohol o agua oxigenada y desechar el parásito en un recipiente con alcohol o agua hirviendo.

Estrategias Generales para la Prevención

Además de abordar plagas específicas, existen estrategias generales que pueden ayudar a prevenir la invasión de insectos no deseados durante el verano:

  • Mantén la limpieza: Una higiene rigurosa es fundamental para prevenir plagas. Limpia los restos de alimentos, evita acumulaciones de basura y aspira regularmente para eliminar posibles fuentes de alimento.
  • Sella las entradas: inspecciona tu hogar en busca de grietas, rendijas y huecos por donde los insectos puedan entrar. Sella cualquier abertura para prevenir intrusiones no deseadas.
  • Control de la Humedad: Mantén los niveles de humedad bajo control, ya que muchas plagas prosperan en ambientes húmedos. Utiliza deshumidificadores si es necesario y corrige cualquier fuga de agua.
  • Jardinería Responsable: Si tienes jardín, realiza un mantenimiento regular. Corta el césped, elimina maleza y asegúrate de que no haya acumulaciones de agua estancada alrededor de tu propiedad.

Disfruta de un verano sin plagas

En resumen, abordar las plagas domésticas en verano requiere una combinación de medidas específicas para cada tipo de plaga y estrategias generales de prevención. Mantener un hogar limpio, sellar posibles puntos de entrada y ser proactivo en la prevención son las claves para disfrutar de un verano sin molestias causadas por estas indeseadas invasiones.

Recuerda, la prevención es la mejor defensa contra las plagas. 

Si implementas estas estrategias de manera consistente, podrás mantener a raya a las criaturas no deseadas y disfrutar de un verano tranquilo en tu hogar.

Sobre el autor
Armando Páez Avila

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